La mente humana es maravillosa y muy compleja. Tanto, que a veces no sabemos discernir qué es lo que nos sucede. Obviamente, esto puede ser un grave problema, pero para alguien como yo es de lo más interesante.
De hecho, muchas veces nuestro lenguaje denota que confundimos muchas de “estas cosas” que nos pasan en la cabeza.
Para mí, es realmente interesante saber diferenciar todo lo que sucede en mi cerebro y en mi comportamiento. No solo por ser psicólogo, yo creo que para cualquier persona es muy útil para poder tener un mayor conocimiento de sí mismo y actuar en consecuencia si hay algo que no funciona.
En este post, me quiero centrar en dos aspectos que normalmente traducimos en la misma sensación, ¡pero no, no lo son!
Me refiero a las emociones y los sentimientos. Evidentemente, tienen una relación entre ambas y no son independientes pero ni el tiempo que dura una emoción es igual que la de un sentimiento, ni la reacción fisiológica es la misma. ¡Vamos a verlo un poco mejor!
¿Qué es una emoción?
Una emoción corresponde a una reacción neuroquímica y hormonal ante un estímulo externo. Es una reacción inmediata que asociamos este estímulo con una consecuencia, de forma irracional e instintiva. La alteración en las sensaciones de nuestro cuerpo es física, como por ejemplo puede ser el aumento de pulsaciones o la sudoración. La duración es por un intervalo reducido de tiempo.
Algunas de las emociones más representativas son la tristeza, la alegría, el enfado o el miedo. Como podéis ver, son todas reacciones instintivas ante una pérdida, como el caso de la tristeza, el miedo como síntoma de protección o la alegría ante un hecho positivo. Todas ellas, son emociones.
¿Qué es un sentimiento?
Un sentimiento es una respuesta automática e incontrolable ante una situación. También viene predispuesto por experiencias previas, pero no necesariamente se producen por un estímulo externo, sino por la conexión entre la experiencia y las conexiones neurológicas internas. Es decir, se trata de una respuesta mental.
El sentimiento es un estado mucho más constante, resultado de una reflexión Por eso, la felicidad, el dolor o el amor son sentimientos.
La Conexión Emoción-Sentimiento
Un sentimiento puede provocar una emoción concreta en una persona, mientras que una emoción puede preceder a varios sentimientos. Incluso una emoción, de forma repetida, puede generar patrones de conducta que afectan a los sentimientos. Es difícil, en muchas ocasiones, discernir entre ellos.
Claves para diferenciar una emoción de un sentimiento
Para que pueda quedar claro, voy a resumir cada una de las diferencias más claras entre las emociones y los sentimientos.
La Duración
Mientras que las emociones vienen y van y son mucho más intermitentes, el sentimiento dura mucho más. Es mucho más constante, hasta el punto de ser un estado que se encuentra en nuestra mente.
Inconsciente Vs. Subconsciente
La Emoción es una reacción inconsciente ante un elemento externo. Los sentimientos pueden actuar ante hechos externos, pero también internos, dados por el subconsciente de nuestra mente.
Tipo de reacción
La aceleración del pulso, la presión arterial o la sudoración pueden ser reacciones típicas de las emociones. En cuanto al sentimiento, al ser duradero y persistente, se encuentra dentro de la esfera mental de cada uno, no física.
Como puedes ver, discernir entre emociones y sentimientos es un buen proceso para empezar a saber qué pasa y qué soluciones llevar a cabo. Si te cuesta o tienes algún problema, mis terapias psicológicas se fundamentan precisamente en detectarlas para conseguir la estabilidad emocional y mental que todos buscamos, ¡consúltame!