El duelo ante el fallecimiento de un ser querido siempre supone un mal trance. Es algo natural y que todo el mundo tiene que pasar. Es algo de la que ya hablé hace algún tiempo: las fases de duelo.
Sin embargo, hay personas que pueden no superar el duelo o, al menos no hacerlo en lo que supone un período “normal”, el cual comprende entre 1 y 2 años tras la pérdida, o que tiene otro tipo de connotaciones más graves de las habituales. En este supuesto, se trataría de un duelo complicado, el tema de este artículo.
¿Qué es el Duelo Patológico o Duelo Complicado?
También conocido como duelo patológico, el duelo complicado fue un término acuñado por el Doctor Horowitz en los años 80. En este caso, se define como aquel duelo que se ha intensificado, haciendo que la persona se sienta desbordada, que no haya podido avanzar el proceso de duelo, resolverlo o incluso que haya recurrido a conductas desadaptativas.
Tipos de Duelo Patológico y sintomatología
Los síntomas del duelo son comúnmente conocidos. La persona que los padece puede sufrir episodios constantes de tristeza profunda, falta de concentración o negación a aceptar la muerte. El distanciamiento social o la anulación de recuerdos son otros de los síntomas.
Cuando todos ellos se complican, pueden aparecer patologías como la depresión o la tristeza profunda. También pueden aparecer otros problemas como el sentimiento de culpa o incluso el deseo de morir.
En este sentido, para que sea considerado el duelo como complicado, puede ser por diversas causas y sintomatologías, dividiéndose por tipos.
Duelo Crónico
Cuando se habla de un duelo crónico, significa que el período de tiempo para superar el duelo es muy superior al habitual. Así, la persona que lo padece entra en una especie de “bucle” del que no puede salir, a pesar de ser consciente de ello, donde no hay evolución entre las diferentes fases. Hoy en día, se calcula que los síntomas depresivos, tras pérdida suele ser de entre 1 y 2 años.
Duelo Exagerado
En este caso, el duelo exagerado incluye una sintomatología agravada. Los trastornos psiquiátricos derivados de un duelo exagerado son mayores, pudiéndose diagnosticar patologías como la depresión clínica, conductas fóbicas o ataques de pánico. El trastorno de estrés postraumático o el abuso de alcohol y otras drogas suele ser también común en el diagnóstico del duelo exagerado. En este aspecto, los síntomas de depresión mayor en el duelo pueden vincularse a personas que
Duelo Enmascarado
En otras ocasiones, la persona que los sufre puede padecer enfermedades psicosomáticas o conductas vinculadas con la hiperactividad y la depresión. El problema de estas conductas, en el caso del duelo enmascarado, es que la persona no es consciente de que lo sufre. No es capad de reconocerlo, por lo que le puede costar más tiempo poder ponerse en manos de alguien que le pueda ayudar.
Duelo Retrasado
En el momento de la pérdida, una persona puede no padecer ningún síntoma emocional y, en un principio, no tener que superar un duelo. Sin embargo, puede que la reacción sea insuficientemente anómala debido a que necesita ser fuerte por alguien más, por ausencia de apoyo social o porque sencillamente se siente abrumado. Tiempo después puede desencadenar unos síntomas de duelo mucho más exagerados, en lo que se denomina como duelo retrasado o inhibido. En algunas ocasiones, puede ser ante la pérdida de otro ser cercano.
Como puedes ver, tanto el período del duelo, como la consciencia o no de padecer dicho duelo, son fundamentales para poder determinar, según el caso, del tipo de duelo que se padece, con el fin de proporcionar la mejor ayuda posible.