Hoy me quiero centrar en un trastorno referente a la salud mental que, por desgracia, puede ir en aumento en el futuro. Me refiero al Trastorno Obsesivo Compulsivo, el cual responde a sus siglas como TOC.
En este artículo, os voy a hablar sobre cuáles son sus síntomas y las posibles causas del trastorno obsesivo compulsivo, así como del diagnóstico y de su posible tratamiento.
Si padeces este problema, puedo ayudarte. En mi consulta, realizo diferentes terapias para paliar el trastorno obsesivo compulsivo, en cualquiera de sus manifestaciones, ¡consúltame!
¿Qué es el trastorno obsesivo compulsivo?
Se puede definir el trastorno obsesivo compulsivo (TOC) como una patología en la que se suelen presentar, en nuestra mente, una serie de pensamientos y rituales, de manera repetitiva. Este tipo de pensamientos afectan notablemente a la salud mental, ya que la persona que los sufre no los puede controlar, ni evitar.
¿Cuáles son los pensamientos obsesivos?
Para saber un poco más acerca del trastorno obsesivo compulsivo, lo mejor es ver los tipos de pensamientos que nos pueden surgir, que pueden ser poco racionales o exagerados.
Miedo a los impulsos
Se trata de la obsesión a tener cierto impulso agresivo o de dañar y causar miedo, de forma irracional, hacia personas de nuestro entorno.
Fobias y temores
Hay muchos temores que pueden surgir, como el de contagiarse, así como la agorafobia, o la fobia a no gustar a los demás por defectos físicos que padezcamos.
Dudas repetitivas
Se trata de, de forma compulsiva, de comprobar una serie de cosas, con el fin de evitar una catástrofe o un problema, como podría ser el comprobar si te has dejado el gas abierto, la puerta abierta, etc.
Todos estos pensamientos hacen que la persona que sufre de este trastorno tenga una reacción defensiva, mediante actos con los que poder evitar las consecuencias que se vienen en dichos pensamientos. ¿Y cuál es el problema si no reacciona así? Que comienza a padecer ansiedad.
Síntomas del TOC
También, podemos encontrar una serie de actitudes y patrones concretos que se atribuyen a este trastorno. Vamos a verlo.
Tener todo bajo control
Una de las pautas que siguen a muchas personas que padecen TOC es que necesitan tener todo bajo control. Es lo que les ofrece mayores garantías y mayor seguridad, por lo que no saben manejarse ante situaciones imprevisibles.
Perfeccionismo y detallismo
Una persona con TOC suele ser perfeccionista. Por eso, no tolera los errores, propio o ajenos, y necesita estar en constante revisión, tanto en su vida laboral como personal.
Exceso de responsabilidad
Las personas que padecen TOC pueden tener un sentimiento excesivo de la responsabilidad. En este sentido, piensan siempre en una serie de reglas o patrones de conducta que se estipulan con hacer siempre lo correcto.
Importancia de sus propios pensamientos
Se da una excesiva importancia a los pensamientos que tiene, así como de su significado que le atribuye. Por eso, precisamente una de sus obsesiones es poder controlar sus propios pensamientos.
Causas del TOC
Uno de los principales problemas sobre el trastorno obsesivo compulsivo es que no se sabe, a ciencia cierta, cuáles son sus posibles causas. Sí que es cierto que se encuentran ciertos patrones en cuanto a su aparición, como es en la adolescencia o siendo un adulto joven, en torno a los 20 años.
De la misma manera, diversos estudios se centran en que la educación, por parte de los padres, como uno de los puntos clave. Por ejemplo, un estudio resalta que un mayor rechazo de ambos progenitores y una carencia de calidez emocional en la infancia puede ser uno de los causantes. Puedes leerlo aquí.
Por otro lado, otra de las hipótesis que se manejan es que la educación rígida y sobreprotectora puede relacionarse con el desarrollo de síntomas del TOC, como la necesidad de control, el perfeccionismo o la sobreestimación del riesgo.
Además, este tipo de trastornos pueden aparecer tras una experiencia traumática, como el fallecimiento de un ser querido o por haber sufrido un abuso.
Tratamiento para el TOC
No hay una manera de prevenir el trastorno obsesivo compulsivo, por lo que la solución es seguir con un tratamiento adecuado.
La forma más eficaz de poder mejorar consiste en realizar una terapia cognitiva-conductal con un psicólogo, presentando una serie de escenarios, de forma controlada, para que el paciente consiga enfrentarse a sus obsesiones y poder modificar su reacción, evitando así males mayores, como la ansiedad.
En otras ocasiones, esta terapia se puede complementar mediante la prescripción de fármacos antidepresivos, recetadas por un psiquiatra. Eso sí, se recomienda que sea un tratamiento complementario a la terapia, nunca sustitutivo del mismo.
Como puedes ver, el trastorno obsesivo compulsivo es todavía una patología en la que es necesario profundizar y donde quedan muchas respuestas. Sin embargo, existen mecanismos de tratamiento eficaces para hacer que esta patología no nos impida lograr una mejor calidad de vida.